Incendios: preocupación por la acumulación de material vegetal altamente combustible

   Si bien no son pocos los productores que han realizado, nuevamente, los correspondientes cortafuegos para evitar la propagación de eventuales incendios, la recomendación es acelerar los trabajos en razón de las muy altas temperaturas actuales, el incremento del viento, la ausencia de lluvias (algo típico en este mes) y la falta de mantenimiento.

   La acumulación de material vegetal fino y altamente combustible es preocupante para todo el sector productivo que, incluso, por estos días realiza la cosecha de la siembra fina, con todos los riesgos que ello conlleva.

   Del mismo modo, hay dos aspectos que han tornado la situación por demás crítica:

—La trágica inundación del 7 de marzo en nuestra ciudad, que incluyó altos milimetrajes en una amplia región y creó las condiciones para la generación de pasto de manera frecuente, algo que se consolidó con precipitaciones posteriores.

—El abandono de obras por parte de Vialidad Nacional de los sectores que van desde las calzadas, de cuyas rutas nacionales también se los ha liberado de obras, hasta los alambrados de los campos.

   Esta circunstancia provoca una importante peligrosidad, que fácilmente se advierte en banquinas que, en muchos casos, superan el medio metro de altura.

   Del mismo modo, algunos focos también son factibles de iniciarse en torno a las férreas que transitan por la zona y donde la altura los pastizales es por demás significativa.

   A esto se suma que, justamente por las altas temperaturas, pueden producirse tormentas eléctricas, que es una de las razones provocadoras de inicio de fuego.

Recomendaciones para productores

   Los especialistas del área de Teledetección y Sistemas de Información Geográfica del INTA Ascasubi sostienen que, hoy, están dadas, todas las condiciones para la generación de incendios.

   El escenario es de 30, 30 y 30 (cuando se propaga el fuego tras el inicio de un incendio): más de 30 grados de temperatura; vientos de más de 30 kilómetros y más de 30 por ciento de humedad.

   En este caso, los puntos a tener en cuenta son:

—Realizar tareas de prevención consistentes en mantener limpias de material combustible las picadas cortafuego, alambrados e instalaciones.

—Para prevenir se recomienda hacer un adecuado manejo del pastoreo y rotación de cultivos en zonas susceptibles de incendio, así como realizar quemas preventivas controladas en los momentos adecuados durante el año.

—Las aguadas tienen que estar lo más limpias posibles y ser de una superficie adecuada a la cantidad de hacienda del productor, ya que constituyen un posible refugio para los animales en caso de peligro.

—Es imprescindible mantener alambrados, cortafuegos, picadas e instalaciones libres de vegetación, tarea que puede realizarse con arado o rastra de discos en una franja de 8 metros a cada lado del alambrado en los potreros con vegetación baja y de 20 metros en los campos con monte. Asimismo, hay que coordinar con municipios y las direcciones de Vialidad Provincial y Nacional el mantenimiento de las banquinas de rutas.

—Es importante no dejar materiales inflamables expuestos a altas temperaturas como leña, papel, pintura y/o combustibles, así como mantener los accesos despejados y tanques australianos llenos de agua.

—Para el interior del establecimiento, se recomienda mantener los márgenes de alambrados libres de vegetación. Y, cuando se realicen quemas de potreros, avisar con 72 horas de antelación a los cuarteles de bomberos más cercanos para una buena planificación, así como avisar a los vecinos.

—En potreros linderos a rutas o líneas férreas, se deben realizar cortafuegos de 20 metros, ubicados entre el alambrado y la vía de comunicación.

—En el interior del establecimiento los márgenes de alambrados deben estar libres de vegetación.

—Hay que alertar sobre el manejo de maquinaria agrícola y herramientas que produzcan calor o chispas, así como limpiar las cosechadoras en lugares sin vegetación y realizar cortafuegos en zonas de almacenamiento de rollos o fardo de pasto.