“El mes de noviembre comenzó con una oferta reducida. Y, es probable, que a medida de que las lluvias se generalicen y alcancen las zonas que continúan con sequía, la oferta se limite aún más. Por la devaluación, a esta altura inevitable, y la incertidumbre se mantendrán por varias semanas más”.
El concepto pertenece al Lic. Ignacio Iriarte, consultor de mercados ganaderos, sobre la actualidad del mercado ganadero.
“Está quedando atrás una liquidación corta, pero intensa, y los primeros registros de la segunda campaña de vacunación contra la aftosa estarían mostrando aún menos hacienda que lo esperado”, agregó.
“Los feedlots han empezado a vaciarse, ahora más rápido que unos meses atrás, y se puede vislumbrar una escasez de ganado gordo liviano para los primeros meses de 2024. La creciente, cuyo pico todavía no ha llegado, agravará el faltante de novillos ya en curso”, sostuvo.
Iriarte dijo que vienen meses de alta inflación, incertidumbre, sucesivas devaluaciones, escasez de oferta, y si el clima acompaña, de retención ganadera.
“El mercado internacional, probablemente, seguirá demandando altos volúmenes por varios meses más, pero a precios bajos. Con el paso de los meses, la oferta ganadera será la protagonista del mercado: la seca dejará una huella, al menos, por dos años”, indicó.
El Lic. Iriarte señaló que, pese al contexto económico muy adverso, los precios del ganado se ubican hoy en términos reales por encima de un año atrás, al haber subido todas las categorías en los últimos doce meses bien por arriba de la inflación.
Lic. Ignacio Iriarte, consultor de mercados ganaderos.
“En el caso del novillo (promedio general) en Cañuelas, el valor real a moneda constante se ubica, hoy, un 18 % por encima de principios de noviembre de 2022, mientras que el precio del novillito de consumo resulta actualmente un 17 % más alto que un año atrás”, explicó.
El precio de la vaca gorda subió, en términos reales, un 23 % y la vaca consumo o manufactura muestra una mejora interanual del 50 %.
El novillo Hilton, por su parte, vale un 25 % más en términos reales que un año atrás, mientras que el ternero de 180-200 kilos vale, hoy a moneda constante, un 27 % más que en noviembre de 2022.
“Debe recordarse que, en noviembre del año pasado, el precio del ganado acumulaba una sensible caída con respecto a los picos de valores (reales) alcanzados en el otoño previo”, añadió.
“Si comparamos los precios actuales, a moneda constante, con los máximos históricos del otoño del año pasado, vemos que el novillo vale actualmente un 16 % menos que entonces, mientras que el ternero de invernada se ubica sólo un 6 % por debajo del máximo histórico de mayo de 2022”, aseguró el Lic. Iriarte.
Fuente: fifra.org.ar