Cr. Ricardo Buryaile, exministro de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación en el período diciembre de 2015/noviembre 2017.
“Señor presidente Alberto Fernández: usted responsabiliza a los productores por la inflación, los amenaza con instaurar cupos a las exportaciones o subir las retenciones, pero parece desconocer que los productores no tienen capacidad real de influir en el precio final que pagan los consumidores.
Nunca la amenaza puede ser una invitación al diálogo.
“Presidente, usted les pide a los productores que presenten una propuesta de desacople de precios, ignorando cómo funcionan las cadenas de valor; es decir, cómo se forman los precios desde el productor primario hasta el consumidor final. Sería bueno que entienda que el desacople de precios al que usted hace referencia en un diario está dado en primer lugar por el desdoblamiento cambiario entre el dólar oficial y el dólar MEP. Un productor argentino, en el caso del trigo y del maíz, recibe un 50 por ciento menos en pesos de lo que recibe un productor de Paraguay, Brasil o Uruguay. En el caso de la soja los productores argentinos reciben un tercio de lo que reciben los productores de los otros países de la región.
“Usted le está pidiendo al primer eslabón de la cadena de valor que realice una propuesta de desacople de precios cuando los productores agropecuarios no son formadores de precios, son tomadores de precios, no hay cartelización en este rubro porque se multiplica por miles los productores a lo largo y a lo ancho del país. ¿Cómo puede pedirle al primer eslabón que determine el precio que paga el consumidor cuando ni siquiera puede incidir en el propio precio al que vende su producción?
“El productor agropecuario no tiene capacidad de influir en los impuestos nacionales y provinciales, en el precio del transporte y mucho menos en las utilidades que reciben los intermediarios y supermercadistas”.
“Antes de hablar y lanzar estas amenazas, Presidente, usted debería saber cuál es la incidencia del valor al que los productores venden sus productos sobre el precio que el consumidor paga en los supermercados. En el caso del valor del trigo, éste tiene una incidencia de sólo el 10 por ciento sobre el precio del pan, en el caso del maíz la incidencia en el precio de la carne vacuna es de entre el 15 y 22 por ciento y en el precio de la carne aviar es del orden del 20 por ciento.
“Para que quede claro: usted está pidiendo a que quienes no controlan entre el 80 y 90 por ciento de la cadena de valor que sean los responsables de fijar el precio final de los productos. Usted sabe que esto es imposible. Sólo está escondiendo la intención de recaudar 400 millones de dólares adicionales a los más de 10.000 millones de dólares que va a recaudar en 2021 por las retenciones.
“También quiero decirle que el restablecimiento de los cupos de exportación significará volver a la política de la tristemente famosa “ONCCA-Oficina Nacional de Control Comercial Agropecuario”, que reinó durante el kirchnerismo y que fue un antro de discrecionalidad y corrupción, como saben todos los ciudadanos, incluido Usted. Esta política ya fracasó y a los únicos que benefició fue a los grandes exportadores; es como poner a un zorro a cuidar un gallinero, porque lo primero que sucede cuando se establecen cupos es la depresión de los precios internos, lo que lleva a los productores a malvender sus productos a los exportadores quienes, cuando logran acceder a un cupo, venden todo a precio pleno. Mientras existió la ONCCA, los exportadores tuvieron una utilidad de un tercio extra a cuando ésta no existía.
“¿Acaso señor Presidente, leyó que Estados Unidos, Australia, Paraguay o Uruguay hayan tenido que tomar medidas como las que hoy usted planteó para controlar la inflación? ¿Acaso usted abona a la teoría de la maldición de exportar alimentos?”
“Señor Presidente; es hora de plantear una política económica, fiscal y monetaria seria para luchar contra la inflación en lugar de poner como enemigos número uno de la sociedad a los productores agropecuarios”.
Fuente: Facebook Ricardo Buryaile