Las exportaciones de carne bovina de Argentina a sus dos principales mercados están prácticamente detenidas por los efectos de la pandemia de coronavirus, con China adquiriendo el 15 % de lo que solía comprar y los embarques a la Unión Europea (UE) detenidos, dijeron representantes del sector a Reuters.
Argentina es el cuarto exportador mundial de carne de res y, según datos del Gobierno argentino, en 2019 China recibió el 75 % del total de las 845.000 toneladas de cortes exportados por nuestro país, mientras que el bloque europeo se llevó el 9 % de esos embarques.
Sin embargo, cuarentenas y dificultades logísticas causadas por la expansión del virus que ya ha afectado a más de un millón de personas en el mundo y causado más de 52.000 muertes han golpeado los flujos comerciales globales, incluyendo el del producto por el cual Argentina es mejor conocido.
"Los mercados de exportación, por las consecuencia de la pandemia (de coronavirus) que estamos atravesando han reducido muchos sus compras, están sumamente restringidos", dijo Mario Ravettino, presidente del Consorcio de Exportadores de Carnes Argentinas ABC, que agrupa a los frigoríficos que exportan la celebrada carne argentina.
Mario Ravettino, presidente del Consorcio de Exportadores de Carnes Argentinas ABC.
Los frigoríficos exportadores argentinos han volcado su producción al mercado doméstico para mantener operativas sus plantas, aunque eso signifique que el margen de ganancia de la actividad sea inferior.
De acuerdo con Ravettino, en marzo las exportaciones de carne bovina a China fueron de solamente un 15 % de las casi 50.000 toneladas que -de acuerdo con datos oficiales- se estaban embarcando de manera mensual al gigante asiático a fines del año pasado.
Y el motivo de la brusca desaceleración son las dificultades logísticas portuarias en territorio chino generadas por las medidas de cuarentena, que también han afectado los patrones de consumo en un país donde la demanda de carne bovina ha crecido en los últimos años, explicó Ravettino.
El mercado europeo, un histórico consumidor de los cortes más caros de la carne argentina, también ha visto desacelerar su demanda del producto del país sudamericano. Aunque, a diferencia de China, prácticamente está paralizada.
"Europa prácticamente tiene todos los restoranes cerrados porque están en cuarentena y la carne vacuna en Europa se consume básicamente en restoranes. Entonces los importadores dijeron 'pará, no me mandés'", dijo Miguel Schiariti, director de la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes argentina (CICCRA).
Los frigoríficos exportadores argentinos han volcado su producción al mercado doméstico para mantener operativas sus plantas, aunque eso signifique que el margen de ganancia de la actividad sea inferior al del comercio exterior.
"El comportamiento del futuro es imposible hacerlo en este momento, entonces estamos intentando sobrellevar de la mejor manera posible lo que estamos atravesando ahora", dijo Ravettino, que señaló que, no obstante la coyuntura, la actividad en los frigoríficos argentinos continúa con normalidad.
Fuente: América Economía / Reuters